Qué son los patrones
Un patrón o motivo (pattern) es una imagen que, colocada junto a
copias de si misma puede repetirse hasta el infinito sin que el dibujo así
tenga rupturas.
Los patrones o motivos son de varios tipos. El más sencillo es el que
tiene como elemento básico (esa imagen que se repite), una loseta o tesela
oblonga. Las más de las veces esta loseta es cuadrada, pero no es
imprescindible y puede ser rectangular.
La mayoría de los motivos que se usan en decoración se pueden acoger a
este tipo. Son lo más sencillos de componer. Su forma más simple y usual son
los que tienen un cuadrado como base.
Este cuadrado se repite en todas direcciones para formar un patrón. La
tesela puede ser cada vez más compleja.
Con lo que el mosaico resultante es más elaborado.
Eso incluye variaciones de color.
Que permiten que el mosaico sea visualmente más complejo.
Hasta aquí todo es sencillo. El dibujo de las losetas no se mezcla ni
entrecruza. Unas están simplemente al lado de las otras. La cuestión se
complica cuando queremos que la tesela tenga dibujos distintos en cada lado o
muy complejos interiormente y queremos que esos dibujos coincidan para formar
el "infinito" característico de los patrones. Un ejemplo de esto son
las lacerías arábigas o celtas, donde formas a veces muy complejas se enlazan
formando un tejido sin fin. Otro son los dibujos de materiales textiles
estampados.
Lo bonito de
un patrón es que el tamaño esté proporcionado con el uso. Con un patrón de
componente grande aplicado a un espacio pequeño, no se aprecia bien el ritmo de
la repetición. Con un patrón demasiado pequeño aplicado a un espacio grande, no
se aprecian los detalles y comienzan a apreciarse patrones no deseados. El
ritmo visual se empasta